Para imaginar que pasaría si pisamos al Sol, lo primero que debemos hacer es ignorar la temperatura. Porque de no ser así, la solución es sencilla, moriríamos desintegrados antes de llegar al Sol.
Primero, debemos recordar que no hay una superficie sólida en el Sol, en comparación con la Tierra.
Si ignoramos el calor. Tan pronto como pongamos un pie en el Sol, nos hundiremos. La densidad del Sol es menor que 1, y 1 es la densidad del agua. Así que seríamos absorbidos hacia el interior. Sería como caer en una piscina. Solo que el Sol es pura radiación, por tanto, poco duraría nuestra andadura por el Sol, dado que la radiación solar, rompería todas las moléculas de nuestro cuerpo, y moriríamos entre terrible sufrimiento.
¡No hay protector solar que nos salve!