El detector de centelleo, es un detector de radiación que se activa por un destello de luz (o centelleo, de ahí su nombre) que se produce cuando la radiación ionizante atraviesa determinadas sustancias sólidas o líquidas (fósforos), entre las que se encuentran el yoduro de sodio activado por talio, el sulfuro de zinc y compuestos orgánicos como el antraceno incorporado en plásticos sólidos o disolventes líquidos.
Los destellos de luz se convierten en pulsos eléctricos mediante una aleación fotoeléctrica de cesio y antimonio, amplificada aproximadamente un millón de veces mediante un tubo fotomultiplicador, y finalmente contado. Sensibles a los rayos X, los rayos gamma y las partículas cargadas, los contadores de centelleo permiten el recuento de partículas a alta velocidad y la medición de la energía de la radiación incidente.