Una fuente luminosa, como su propio nombre indica, es un objeto que emite luz visible que se percibe por los órganos u aparatos de visión.
Las podemos dividir en prirmarias y secundarias.
- Las fuentes primarias son aquellas que emiten luz por sí mismas.
- Las fuentes secundarias son aquellas, de las cuales, nos llega luz como consecuencia de un proceso de difusión o reflexión.
Lógicamente, cualquier objeto que podamos ver es una fuente secundaria de luz, y las fuentes de luz primarias las podemos clasificar a su vez en:
- Fuentes de espectro continuo: El Sol, lámparas de incandescencia...
- Fuentes de espectro discreto: Lámparas de gases a baja presión, tubos fluorescentes...
También pueden ser clasificadas a su vez en naturales (como el Sol) y artificiales.