Un espejismo es una ilusión óptica que sucede cuando la luz atraviesa capas de aire caliente de diferente densidad, lo cual provoca la percepción de la imagen invertida de objetos lejanos, como si se reflejasen en el agua.
Cuando la superficie terrestre se calienta pucho por la radiación solar, las capas de aire más próximas a la tierra están más calientes que las altas, lo que produce que en lugar de decrecer, la densidad del aire aumenta con la altura, al menos hasta cierta altura. En consecuencia el índice de refracción aumenta con la altura y los rayos luminosos se curvan con la concavidad hacia arriba en elas proximidades de la superficie terrestre.
En cambio, en zonas nevadas o cubiertas de hielo, donde las capas de aire inferiores están frías y son más densas, los rayos de Sol se desvían hacia arriba proyectando a más altura los objetos que están en el suelo. Si nos fijamos, en los fríos días de invierno podemos advertir que las montañas a lo lejos parecen más altas de lo normal. No es que hayan crecido, sino que el aire frío proyecta su superficie hacia arriba.