Este problema que aparece en el libro Los elementos de Euclides es muy sencillo pero puede llegar a ser un gran quebradero de cabeza, es por eso que también es considerado una paradoja matemática.
Imagina que rodeamos una pelota con una cuerda, si alargamos un metro esa cuerda crearemos un hueco entre la cuerda y la pelota de 16 cm, que es un espacio suficiente para que pueda pasar por ahí un conejo.
Bien, la cuestión es la siguiente. Si ahora rodeamos con una cuerda la Tierra y una vez rodeada alargamos la cuerda un metro, ¿Pasaría un conejo entre el hueco creado entre la Tierra y el conejo? ¿Cuánto mediría ese hueco?