El boro es un nutriente crucial para las plantas, un componente importante en la industria nuclear y el ingrediente principal de un fluido extraño llamado oobleck.
Encaramado junto al carbono en la Tabla Periódica de los Elementos, el boro es un metaloide, una sustancia con propiedades tanto metálicas como no metálicas.
Los compuestos de boro, en particular el bórax, han sido utilizados por los humanos durante miles de años, según Chemicool. El bórax (tetraborato de sodio) se forma naturalmente durante la evaporación de algunos lagos de sal, según AZoM, un sitio de referencia en línea para la comunidad de ingeniería y ciencia de materiales. En el siglo VIII dC, el bórax se exportó desde los lechos de los lagos tibetanos a lo largo de la Ruta de la Seda para su uso por orfebres y plateros árabes. También se utilizó para hacer esmaltes cerámicos en China.
Estos primeros usos hacen eco en el nombre del bórax (y, en última instancia, del boro): la palabra proviene del árabe "buraq", o blanco. Sin embargo, el elemento en sí no se extrajo hasta 1808, según la Royal Society of Chemistry. Incluso entonces, los químicos no pudieron obtener una forma pura de boro. Ese objetivo no se alcanzó hasta un siglo después, en 1909, cuando el químico estadounidense Ezekiel Weintraub aisló el 99 por ciento de boro puro.
Las propiedades del boro son:
Número atómico (número de protones en el núcleo): 5
Símbolo atómico (en la tabla periódica de elementos ): B
Peso atómico (masa promedio del átomo): 10,81
Densidad: 2,37 gramos por centímetro cúbico
Punto de fusión: 3,767 grados Fahrenheit (2,075 grados Celsius)
Punto de ebullición: 4000 grados C
Número de isótopos (átomos del mismo elemento con un número diferente de neutrones): 6
Isótopos más comunes: B-10 (abundancia natural 19,9 por ciento) y B-11 (abundancia natural 80,1 por ciento)
Sabías que...
El boro pudo haber sido la clave de la evolución de la vida en la Tierra. El elemento estabiliza la ribosa, parte del ARN, la molécula autoensamblable que puede haber precedido al ADN. (Los virus son esencialmente hebras de ARN itinerantes).
Un estudio de junio de 2014 descubrió que el boro está presente en las rocas más antiguas de la Tierra, que datan de hace 3800 millones de años. Esta investigación demuestra que la Tierra primitiva tenía los ingredientes necesarios para construir ARN.
O tal vez ese primer ARN obtuvo su boro del espacio. Un estudio de 2013 encontró que un meteorito marciano que aterrizó en la Antártida contenía 10 veces el boro de cualquier objeto extraterrestre medido previamente.
El boro, en su forma cristalina, es el segundo elemento más duro detrás del carbono (en su forma de diamante), según Chemicool.
A diferencia de muchos elementos, que se forman en las reacciones de fusión dentro de las estrellas, el boro se formó después del Big Bang por un proceso llamado espalación de rayos cósmicos. Durante este proceso, los rayos cósmicos en colisión dividen los núcleos de los átomos, causando fisión.